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La seguridad en la casa: prioridad de los padres (Parte I)

Los niños con autismo crecen y se desarrollan al mismo ritmo que cualquier otro niño y como le ocurre a todos los padres, han de tener mil ojos cuando empiezan a caminar por sí solos... todo les llama la atención y he de reconocer de que la mayoría, en mayor o menor grado, son muy curiosos.
Cuando mi hermano pequeño comenzó a andar, estábamos entusiasmados porque a parte de que era casi una edad normal para ello, comenzó a andar sobre los 14 meses (al tener síndrome de down nos dijeron que cuanto antes andara, menos discapacidad tendría), podíamos jugar más con él y ciertamente, lo pasábamos genial porque Miguel Ángel era muy risueño.
Miguel Ángel con 2 años.

Sin embargo, la visión de mis padres, sobre todo de mi madre, era muy diferente. 
La casa era un hervidero de peligros para su hijo.

A pesar de las precauciones que adoptó, dada su experiencia con nosotros, muchas otras fueron consecuencias a base de errar y pasar momentos de angustia no aptos para enfermos cardiacos. Mi madre estaba en un constante estado de alerta.
Por eso, este post intentará poner en relieve los peligros de un hogar, no sólo para que los más pequeños con autismo estén seguros, sino para que los padres estén más relajados y tengan calidad de vida.

PUERTASMuchos niños con autismo pueden "escapar" cuando se sienten estresados o asustados, buscando aquel lugar favorito donde se siente tan a gusto. Incluso si se despertaran por la noche, pueden sentir la necesidad de salir de casa y deambular sin ir a ningún lugar en concreto. Por eso, en caso de que tengamos una casa, las puertas que den acceso a la calle y a los patios o jardines, han de tener una cerradura con llave por ambos lados, es decir, que tanto para entrar como para salir, se haya que girar la llave. Si tenéis un piso, es recomendable lo mismo para la puerta de entrada y la de la terraza, así como la que acceda a lavaderos sin cierres.
Recordad que la mayoría de las personas con autismo no perciben el peligro por lo que si tenéis una terraza o balcón sería conveniente poner algún cierre, malla de acero o similar con el fin de evitar que puedan intentar saltar.

Las escaleras siempre protegerlas con puertas de bebé con cerrojo, no sólo como disuación para bajar o subir, sino también para evitar que tire cosas o muebles escaleras abajo y os puedo asegurar que nosotros lo sabemos bien.. no os podéis imaginar todo lo que Miguel Ángel ha hecho rodar escaleras abajo.

Para aquellas habitaciones en las que queréis preservar de las manos de los niños, como pueden ser despachos, habitación de estudios, etc, también es aconsejable instalar una cerradura con llave o un pestillo, pero recordad que en caso de este último, siempre en el lugar más alto posible, con el fin de que les pueda resultar lo más difícil posible acceder a él.  

Miguel Ángel curioseando el baño de un hotel.
Todo esto me recuerda aquella vez que mi hermano Miguel Ángel se encerró en el cuarto de baño. Tenía el clásico pestillito por dentro para reservar la intimidad del momento. Por más que le decíamos que abríera, incluso intentando persuadirlo con darle chocolate o galletas, él no abría. El cuarto de baño tenía una ventanita pequeña y subiendo por unas escaleras pude verle... se estaba empezando a poner nervioso, estaba asustado y empezaba a llorar. Llamaba a mi madre "má ... má" ... la verdad es que no sabía cómo deshacer lo que había hecho. Intenté colarme por la ventana, pero no podía...algo que vemos a diario en las películas, a la hora de hacerlo tú, es una odisea... tuve rechazar esta opción. Así que le dije a mi madre... "mamá, voy a coger un martillo y golpear la puerta a la altura donde está el pestillo para que ceda y podamos entrar"...mi madre tenía el horror dibujado en su cara porque por un lado, quería abrir la puerta, pero por otro, no quería que se rompiera porque la situación económica no estaba para comprar puertas. Así que cogí un taco de madera bastante gordo que tenía, lo coloqué a la altura del pestillo y golpeé con el martillo sobre el taco, con esto evitaba golpear directamente la puerta y amortiguar el golpe.. el pestillo, cedió al momento y pudimos "rescatar" a Miguel Ángel.
Así que los pestillos que queden por dentro de la habitación mejor no tenerlos y si no tienes más remedio, cuanto más altos, mejor.

VENTANASLas ventanas es necesario que estén con rejas. Recuerden que la distancia de los barrotes ha de ser la necesaria para que un niño pequeño no pueda introducir su cabeza entre ellos. En caso de que la reja de la ventana pueda abrirse, ponerle cerradura y guardar la llave en un lugar al que no pueda acceder, un cajón con llave, un armario con cerradura, etc. Algunos niños tienen vértigo pero eso no les impide querer tirar cosas por las ventanas, la reja evitará esos pequeños accidentes con los viandantes.

Miguel Ángel era un niño al que le encantaba tirar cosas por la ventana. Ha tirado de todo, desde peluches, pasando por ropa, y terminando por cacerolas. Donde ponía el ojo, ponía el objeto, no le hacía falta acercarse a la ventana, tan solo le bastaba con apuntar y lanzar, así que tuvimos que poner rejas para evitar que pudiera dañar a cualquier persona.

ESPEJOS: Una de las cosas que aprendimos al ir a conocer la Asociación de Autismo Sevilla, fue comprobar que en los servicios no tenía espejos, sino eran de un material irrompible que reflejaba la imagen, creo que eran de metacrilato, pero en cualquier caso, eran ideales porque no sólo no se rompen sino que, además, pueden ser atornillados o pegados a la pared. Todo un invento.

La estantería de sus peluches está fijada a la pared.
MUEBLES:  Todos aquellos muebles susceptibles de que puedan ser movidos con cierta facilidad han de estar fijados en la pared o en el suelo, o incluso, a ambos. Miguel Ángel cuando se enfadaba, o cuando aparecía alguna conducta disruptiva, tiraba todo lo que tenía a su alrededor. No solo hay que mirar que en 5 minutos es capaz de dejarte inservible media casa, sino que él mismo podía hacerse daño al querer tirar algo. Recordemos que suelen tener una gran fuerza en esos momentos, por lo que recomendamos no subestimar la fuerza que tienen.. más vale que estén bien fijados antes que tener que lamentarlo. Así que pronto empezamos a atornillar muebles y estanterías. Hoy en día, en el mercado, podemos encontrar gran surtido de estanterías y muebles que puden ser atornillados, ya que vienen dispuestos para sólo tener que aportar los tornillos y tacos, y hacer unos agujeritos con el taladro en la pared o suelo.

Hacen cualquier cosa para alcanzar lo que quieren
Nosotros tuvimos que fijar el teléfono fijo en la pared porque Miguel Ángel solía tirarlo, desde que lo fijamos, ya no volvió a intentarlo. 

Otros elementos susceptibles de este tipo de accidentes son los televisores, monitores y ordenadores. Los televisores vienen hoy en día preparados para poder ser colgados en la pared, y si no, siempre hay soportes para ello, y sobre todo, colgarlos en lugares más bien altos. Respecto a los ordenadores mejor será que estén en esa habitación que está bajo llave, por si acaso. 

En una ocasión, en su unidad de día, Miguel Ángel tiró un mueble de pvc, con la mala suerte de que le cayó en el pie... lloró mucho en ese instante, pero nada más. Aunque eso no quiere decir que no le doliera, porque sí le dolía, lo que ocurre es que suelen tener un gran aguante del dolor y cuando se quejan de algo es porque realmente el dolor es insoportable. Se llevó varios días cojeando.

Nuestra casa es nuestro hogar y es nuestra zona de conford... es necesario que también lo sean para nuestros niños con autismo.

La próxima semana hablaremos de más medidas de seguridad... la tranquilidad en nuestras manos.   





Fuentes:
Héroes de Aiden: Autismo Blog: "Seguridad y prueba de niños" 

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